06/08/2021

Ação Educativa emplea la metodología Fútbol Callejero para crear espacios seguros para el diálogo. La iniciativa es apoyada por Interpaz.

El Fútbol Callejero utiliza el deporte como herramienta para la mediación de conflictos, organización comunitaria y promoción de una cultura de paz. También conocido como Street Soccer/Futebol de Rua, se juega con equipos mixtos de mujeres y hombres, que definen colectivamente las reglas centradas en tres ejes: cooperación, solidaridad y respeto. Ação Educativa reunió en una publicación ocho experiencias en las que la práctica es utilizada para reducir las desigualdades de género y fomentar el diálogo y el respeto a las diversidades. Para la organización, el fútbol es una de las más encantadoras expresiones de la cultura periférica.

“Entendida como manifestación cultural y una de las dimensiones del derecho y ejercicio de la ciudadanía, especialmente en las periferias urbanas, donde existe una mayor necesidad de políticas públicas para su implementación -, en este proyecto [Interpaz] se trabaja el fútbol menos por su aspecto deportivo y más por la producción simbólica que emana de su práctica, presente en todos los territorios de los límites de la metrópolis”, dice un extracto de la Guía.

La metodología Fútbol Callejero se encuentra entre las iniciativas apoyadas por el Proyecto Regional Interpaz. Ação Educativa es la organización responsable de implementar esta actividad en Brasil, a través de la creación de colectivos de fútbol callejero y la publicación de un manual para replicar la metodología en otras comunidades.  

FUTEBOL E CULTURA: práticas de futebol colaborativo e solidário

Idioma: PORTUGUÉS

Consulte en esta guía las experiencias con la práctica del fútbol callejero para la deconstrucción de prejuicios y afrontamiento a las desigualdades de género que afectan a las niñas, mujeres y personas LGBTQI+. Considerando el fútbol un deporte históricamente dominado por hombres y asociado a la masculinidad, estas iniciativas llevadas a cabo en Brasil y otros países latinoamericanos tienen diferentes formas de promover una cultura no violenta, con espacios seguros para el diálogo, la tolerancia y la igualdad de género.