22/09/2022

Participantes de talleres creativos impulsados por el MUPI con niñas, niños y adolescentes de El Salvador, cuentan su experiencia en el proyecto, que busca promover espacios seguros y la cultura de paz en escuelas públicas 

Desde el 2014, con el apoyo de tdh Alemania, el Museo de la Palabra y la Imagen (MUPI) viene impulsando en El Salvador proyectos relacionados a la promoción de cultura de paz. El museo ha desarrollado metodologías participativas dirigidas a educadoras y educadores, así como a niñas, niños, adolescentes y jóvenes, buscando promover la resolución no violenta de conflictos en los ámbitos educativos. 

En este marco, el MUPI empezó a implementar en el 2015 el proyecto “Escuelas de Paz”, dedicado a realizar talleres creativos para la creación de espacios libres de violencia y para el fortalecimiento de una cultura de paz con niñas, niños y adolescentes en escuelas públicas. En estos talleres, se abordan conceptos relacionados a la cultura de paz y la igualdad de género por medio de juegos, dinámicas y también a través de la enseñanza de cinco modalidades artísticas: música, batucada, fotografía, serigrafía y dibujo-pintura. El proyecto es especialmente importante en un país donde las pandillas dominan muchas escuelas y no se puede hablar abiertamente de prevención de violencia y cultura de paz porque la estructura pandilleril considera que eso pone en riesgo su accionar. En el ámbito del Interpaz, niñas/os y adolescentes asumen después el rol de multiplicadoras/es y comparten sus aprendizajes con nuevas/os participantes en los talleres.

Para saber más sobre este proyecto, conversamos con dos participantes, Nicole Beatriz Hernández Rodríguez, de 15 años de edad, y Lenin Steven Giron, de 14 años. Los dos están en la misma clase, en noveno grado de una escuela pública de El Salvador, donde participan en el taller de batucada desde el sexto grado. Los encuentros se realizan una vez a la semana, los viernes, después de las clases del sistema de enseñanza formal. Los talleres tienen duración de dos horas, facilitados por un educador, y el grupo de Nicole y Lenin cuenta con ocho estudiantes.

Compartimos a continuación cómo fue este diálogo. 

¿Cómo conocieron esta iniciativa y decidieron participar?

Lenin: La directora me dijo si yo quería meterme a estos talleres. 

Nicole: A mí también, la directora me habló porque habíamos estado en un grupo musical de la escuela antes. Participamos de este grupo de parte de la escuela, no del MUPI. El profesor se fue, y fue cuando la directora nos llamó para participar en este grupo del MUPI.

¿Cómo se sienten participando en el taller?

Nicole: Antes tocábamos otros instrumentos, de aire y teclas, entonces fue un cambio drástico pasar a la batucada. 

Lenin: En los ensayos, nos decían que íbamos a tener presentaciones, y se sentían los nervios.

Nicole Hernández Rodríguez y Lenin Steven Giron participan en entrevista virtual sobre los talleres creativos
Nicole y Lenin participan en entrevista virtual desde su colegio en San Salvador

¿Por qué decidieron participar en el taller?

Lenin: Para estar distraído y relajarme de otras actividades de la escuela.

Nicole: Me gusta la música y porque quiero superar a mi hermano que es músico. Es una competencia que tenemos entre nosotros (rizos).

¿Cómo son las actividades del taller de batucada?

Lenin: Hacíamos mini juegos sobre un tema y empezábamos ya a practicar la batucada.  También hacíamos dinámicas, juegos, clases…

Nicole: Hacíamos dinámicas, luego nos explicaban el propósito de la dinámica y pasaban a un tema. Después había un refrigerio y empezábamos a ensayar los ritmos.

¿Cómo es la participación de niñas y niños en el taller?

Nicole: Algunos se fueron saliendo, otros regresaban, después salían. Se sentía raro al inicio porque éramos niñas y niños de diferentes grados. Conforme pasó el tiempo, hemos estado más unidos. La mayoría era de grados distintos, de diferentes edades. ¡Había una chica de cuarto año, que nos impresionó! Pero, funcionó bien la diversidad de edades, al final nos llevamos bien.

¿Por qué ustedes creen que algunas/os niñas/os dejan de participar en el taller?

Nicole: Se nos dificulta el aumento de tareas en la escuela [convencional], muchas veces es difícil para nosotros quedarnos. 

¿Qué cambió en su vida luego de su participación en el taller?

Nicole: La batucada me distrae de las tareas, de los problemas del exterior. En ese momento solo existe el instrumento y yo, lo demás queda atrás. Con nuestros compañeros es lo mismo, distraerse, estar disfrutando de lo que hacemos. El taller muestra a las personas que pueden distraerse con cosas sanas y encontrar un lugar de relajación.

Lenin: Igual me distrae mucho, me relaja de todas las tareas que tengo que hacer.

¿Qué sugerencias harían para otras personas que quieran participar en talleres parecidos, o organizar formaciones similares?

Nicole: Que no tengan miedo a intentarlo. Que, si hay personas que tienen posibilidad de unirse a un taller, lo hagan, pues se siente bonito. Los profesores son amables, tienen paciencia, y es un lugar donde pueden relajarse de los problemas, aunque sea por un rato.

¿Qué temas eran abordados en los talleres y por qué son relevantes?

Nicole: Eran temas de interés social. Un tema que me marcó fue la toma de decisiones. Nos explicaron cómo tomar decisiones de manera correcta mediante dinámicas y juegos. Otro tema fue el género, y sobre él hicimos varias dinámicas. Eran muy bonitos los temas. Ese tipo de tema no es algo que nos enseñe directamente la escuela. Son temas a parte que nos pueden ayudar mucho en la vida cotidiana. 

Lenin: Hacíamos juegos de acuerdo a los temas.

Nicole: Cuando entramos me sentí un poco bien, porque éramos 4 o 5 niñas, pero iban saliendo porque eran de noveno. Nos quedamos 2 niñas, una de sexto grado y yo. Se sintió raro, porque la mayoría ve el grupo de batucadas como algo de niños, cuando también una mujer lo puede hacer.

¿Cómo se ve la participación de niñas y chavalas en el taller?

Nicole: Somos solo 2 mujeres en el taller. En 3 años, ahora ya me siento más cómoda, pero, a veces, hay comentarios que duelen. Ya escuché comentarios de que yo salga, porque soy niña, pero aquí sigo.

¿Y hablaron sobre esta situación en el taller?

Nicole: Si, hablamos de eso en los talleres.

Lenin: Estábamos hablando de que mujeres y hombres tienen los mismos derechos y las mismas capacidades de hacer lo que quieran. Siento que ahora ya hay más libertad de las mujeres para hacer las cosas, como antes no se permitía tanto. Pero, aún hay gente machista que piensa que una mujer no puede estar en cosas que pueda hacer un hombre. 

Nicole: Eso va cambiando, la gente tiene que ir aceptando las nuevas realidades. En promedio, somos como ocho o nueve en la turma.

¿La metodología de los talleres establece que, al final de los encuentros, ustedes mismos organicen los talleres, verdad? ¿Ustedes ya se volvieron facilitadores de talleres?

Lenin: Aún vamos a empezar a conducir las clases.

Nicole: Sí, y vamos a invitar a otras personas para que se integren. Hay algunas personas interesadas.

¿Cuáles son sus proyectos de vida?

Nicole: Yo primero quiero terminar el bachillerato, después entrar a la universidad. Quiero ser maestra, me gusta enseñar, pero me gusta más trabajar con niños pequeños y tal vez pueda montar un taller de batucada. Cuando consiga trabajo, quiero apoyar a mi familia.

Lenin: No tengo pensado todavía qué quiero ser. Posiblemente, voy a terminar el bachillerato, entrar a la universidad y, si se pudiera, que sea en otro país la universidad [para conocer otras realidades].